Estoy en paz. Tranquila conmigo misma. Plena en mis actuaciones. Satisfecha de mis resultados. Me siento cuidada y protegida. Amparada por su manto protector. Me admito dolida, triste… decepcionada, pero eso no realizará cambio alguno en mis proyectos.
Su altivez le ha servido de collar y el orgullo de vestido. Esas prendas no son de mi gusto. No me entallan al cuerpo.
Me mantengo sobre mis pies, erguida. Como un bambu me doblo, más no me rompo. Y menos ante simples gotas de agua.
Lamento mucho que esto te pueda afectar, pero aún queda mucho de mi para dar.
¡Acéptalo! ¡supéralo! y para que te sea más fácil ¡Coopera!.
Reblogueó esto en cwa115's Blog.
Me gustaMe gusta