Es definitivo, no podemos dejar de vernos con frecuencia. Se que tus obligaciones laborales constantemente te alejan de mi, esclavizándome a un cama que pasa mucho tiempo vacía.
Nuestro pequeño apartamento me parece tan inmenso ante tu ausencia. Todo es frío y estéril. Cada cosa en su correcto lugar. Mis libros perfectamente organizados en el escritorio, sin tus revistas deportivas ocupándome el espacio.
Tu taza de café en el anaquel de la cocina. Impecable, blanca. Sin rastros alguno de uso. Las gavetas de tu ropa organizadAs. Me hace falta la confusión matutina de nuestros móviles en la repisa. Tampoco encuentro motivaciones para llegar a casa cada tarde.
A tu regreso todo es distinto. La casa se llena de luz, el silencio sepulcral queda opacado ante nuestras conversaciones de madrugadas y los cuchicheos que llenan todos los rincones.
Nuestra vajilla se usa, y paso el tiempo organizando los cojines que desarreglas al ver en la tele tus programas de deportes. Vale la pena regresar al anochecer y entregarme a preparar los platos gastronómicos que más te gusten. Sin razón ni motivo aparente. Solo para celebrar que esa noche no cenaré sola.
Levantar juntos la mesa, organizando todo rápido para sentarnos a contar las cosas de nuestro día.
Dormir contigo es un placer. Lanzarnos juntos a los brazos de Morfeo… es el único triangulo amoroso que nos permitimos. Acurrucar nuestros cuerpos entre edredones, huyendo del frío, manteniéndonos calientes. Poder buscarte a media noche y abrazarte para sentirte conmigo. Despertar temprano para buscar el astro rey con una sonrisa en los labios.
Tu compañía me hace feliz. Saberte mío y pertenecerte me complementa. Las horas transcurren bajo la esperanza de verte pronto. Me alegra la existencia tu compañía. Me satisface compartir mi espacio y mi vida contigo. Ahora todo es novedoso e interesante. Esto también pasará. Sólo espero que cuando las cosas cambien los dos logremos recordar estos utópicos meses de recién casados, encontrando en ellos motivos a imitar.
¡Muchas felicidades, pareja! ¡Que esta alegría y este placer os dure muuuuuuuuucho tiempo!
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Gracias, pero es tan solo un preview. 😉
Agnyez!
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Sabes…? Esta entrada me ha dejado sin palabras… Realmente es muy conmovedora e hizo que me remontara a tiempos similares que ya he vivido…
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Me gusta que sea de tu agrado.
Agnyez!
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